Mostrando entradas con la etiqueta comunicación. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta comunicación. Mostrar todas las entradas

miércoles, 5 de diciembre de 2012

Esperando algo/ Expecting something

We all so want to be appreciated, yes we do. Even by people we are disgusted by, or have mutual disgustment feelings. Probably specially by them. I feel nostalgic today. I felt so neglected by a stupid comment during lunch about a recipe I recalled from my aearly infanthood, being not complete. Of course it was not complete, I happened to be 5 o 8 when mom prepared that specific recipe, I just saw part of the process, and the rest was done when we were at school... I was a girl not a cuisine student, and the memory was a rembrance, not an actual recommendation or recipe.
I must do something about my sleeping schedule. I'm cutting books, quitting netbook earlier. Anything that allows me to sleep better, and a bit more. Maybe a bath or a shower when getting home would help too.
I am expecting answers. Or a meeting. A negative or a positive interaction. Anxiety does not rock.
I have thought about the wishlist, and one of the pending wishes... I comment it before a couple of posts back: Buying a morally questionable object intended for adults only that is not either: books, cigarrettes or alcohol. Well its checked. It was not exactly an object, but a service. I opt to go to the usual lady that wax my legs, making an extreme decision of choosing brazilian wax instead of regular bikini. Its morally questionable enough? well I don't know. I expect anyone has something to say about it. It feels though at least kinky.
I think I am addicted to love. I think I am addicted to the hormonal rush that comes with both admiration and interaction with men somehow attractive to me. It sucks. I would so prefer to be a regular free spirit, but it is not a shock to discover I have this urge for men, considering I had sexual dreams when I was a kid, and though they were bizarre, they seemed like the reason to become older. Maybe ... wrong way. We should not expect life to take a different path so many years ago, because we happen to be something today due to casualities and causalities. This blog is turning into a deep return to my ego, and it was not intended to be that. If it entertains someone then its ok, otherwise its lacking its purpose... I wish I could cry right now, I don't know what happens to me that I am so sensitive right now, probably its I am tired, a reason to justify this next biomagnetic session (which I'll try it to be the last for a while... my purse is not exactly exploding on resources) I left my recorder connected to my sister in law's netbook for charge, and forgot it at Viña... hope this weekend we meet and I recover it. I miss even the chance to tape my voice, sad as it is, trying to search for some comfort on the vocalization of an improvised balad.
If you, yes, you, read this and get the message, talk to me. I miss you.
Bus stop composer
La versión nativa.
Todos queremos ser apreciados, sí es lo que queremos. Especialmente por la gente que nos disgusta o por la cual sentimos mutuo desagrado. Probablemente especialmente por ellos. Me siento nostálgica. Tan menospreciada por un estúpido comentario en el comedor acerca del comienzo de una receta que recordé de mi primera infancia, y de que no estaba completa. Claro, yo tenía entre 5 y 8 años cuando mamá preparaba esa receta, y yo sólo veía parte del proceso, el resto era terminado cuando estaba en el colegio... Yo era una niña no una estudiante de cocina, y era un recuerdo memorable, no una recomendación o una receta propiamente tal.
Debo hacer algo acerca de mi tiempo de sueño. Cortar la lectura antes, dejar la internet más temprano. Cualquier cosa que me permita dormir mejor y un poco más. A lo mejor bañar o ducharme al llegar a casa podría ayudar también.
Espero respuestas. O un encuentro. O una interacción positiva o negativa. La ansiedad no la lleva. He pensado acerca de la lista de deseos, y uno de los que está pendientes... Lo comente en un par de posts anteriores: comprar un objeto moralmente cuestionable dirigido al público adulto que no sea libros, cigarrillos ni alcohol. Bueno, de algún modo lo hice. No fue exactamente un objeto sino un servicio. Opté al ir a la depiladora que me arregla las piernas y tomé la para mi extrema decisión de hacerme el depilado brasilero en lugar del típico rebaje. Será suficientemente cuestionable? No lo sé. Espero que alguien tenga algo que decir al respecto. Se siente en todo caso, por lo menos un poco sucio.
Creo que soy adicta al amor. Adicta al shock hormonal que lo deviene tanto de la admiración  como de la interacción con hombres de algún modo atractivos para mi. No la lleva. Preferiría tener un espíritu libre regular, pero no es un shock enterarse de esta urgencia, considerando que tenía sueños sexuales cuando niña, y aunque bizarros parecían la razón para ser adulto. Quizá... camino equivocado. No debiéramos esperar que la vida tomara diferentes caminos, especialmente no tantos años atrás, porque efectivamente somos algo hoy resultado de casualidades y causalidades. Este blog se está tornando en un profundo viaje a mi ego, y no pretendía serlo. Si entretiene a alguien está bien, sino está perdiendo su esencia y propósito... Desearía llorar ahora, no entiendo de dónde proviene tanta emocionalidad, probablemente estoy cansada: una razón para justificar la terapia de imanes de esta tarde (que probablemente sea la última en un tiempo porque mi chauchera no parece estar llenándose de monedas) Dejé mi grabadora conectada al netbook de mi cuñada cargándo baterías, espero verlos el fin de semana para recuperar. Extraño la sensación de tenerla a mano para grabar mi voz, triste como está, tratando de buscar cierto consuelo vocal en una balada improvisada.
Si tú, sí, tú, lees esto y te llega el mensaje, háblame. Te extraño.
Ms. bus stop singer.

lunes, 1 de octubre de 2012

Primer día de octubre, nuevos objetivos

Hola a todos, especialmente a Bee,
Desde el viernes - día de pago- estoy implementando el seguimiento de mis gastos. Es un tema que me tiene jodidamente alerta, porque suelo ser muy relajada con la plata que ocupo, y despreocupada con el tema. Pero mi intención es ahorrar. Entonces tengo que generar una conciencia de la utilización de recursos que me permita prever gastos, y organizar finanzas.
Este mes doblé el primer monto de ahorro, y veremos si llego a fin de mes con el restante. Claro que he disminuido mi avidez por leer, no tanto porque no ame los libros igual que siempre, sino porque he optado por lecturas que me son más ajenas, y por lo tanto me demoran más. Además, mi abuela - a quien visité el fin de semana- me envió a casa con un buen par de libros, y por último, implementaré la vía del intercambio y la venta de los libros para el presupuesto libros. Por lo tanto ése ítem de gasto pretendo disminuirlo.
Por otra parte, el real interés por perder algunos kilos, me tiene bastante entusiasmada con la idea de disminuir el consumo en cafeterías camino a casa. Con eso bajan gastos y calorías. Gran iniciativa. Ojo, esto no significa que desaparezcan de mis planes por completo, sino simplemente ir menos veces a la semana y al mes a comer fuera.
También ocuparé el sistema de sobres para ordenarme. Casi todos los gastos fijos mensuales o bimensuales, los iré guardando en sobres con nombre de destino, para reservar ese dinero a esos fines. De modo de poder usar la plata efectivamente como quiero y no como me veo obligada a hacer, sobretodo a fin de mes cuando se han agotado los recursos: si está planeado se puede lograr.
Bueno, lo que me tiene realmente alerta es la implementación de un método que leí en internet para llevar cuenta de los gastos diarios. Entonces guardo las boletas de lo que compro, y al llegar a casa en la noche, o al día siguiente, ingreso los gastos, con una breve nota de lo que son, en una tabla de excel con la fórmula que permite ir restando automáticamente el dinero que se ha gastado. Y además ir sumando diariamente los gastos fijos y los otros gastos en los que incurro a diario. Luego puedo deshacerme de las boletas... tampoco se trata de juntarlas compulsivamente.
Por qué andar alerta, porque hay gastos que no van con boleta. Las propinas por ejemplo, o un taxi para acercar al trabajo, si no pido el ticket no tengo idea de cuánto gasto en eso. Así pues, trataré de levantarme más temprano para poder evitar los taxis extra, y respetar la mayor cantidad de instancias en las que puedo gastar y en las que no.
Es un desafío que pretendo llevar en el largo plazo. Me interesa viajar, y eso no es regalado, se consigue con esfuerzo. Me interesa eventualmente comprar un departamento o casa chiquita donde vivir, eso tampoco sale gratis, y por último, debo prever tiempos de vacas flacas, y eso simplemente debe ser controlado mediante un ahorro lo más consciente posible.
 
Hay otro tema que me inquieta.
Mi relación con la hermana con la que vivo es inconstante. Pasa por buenos momentos, y otros momentos que surgen intempestivamente de mucha violencia verbal, dolor y acritud. Siento que mis crisis las vivió con lupa, que la afectaron más de lo que me afectaron a mi, al menos en lo que el largo plazo se refiere, que momentos en los que estuve bien, para ella estuve mal, que en su memoria hice cosas que no hice, y eso me desconcierta. Ayer me acusó de intentar aprovechar su extinta amistad con una persona para mi beneficio personal, y no me parece que en ningún momento esa fuera mi intención.
De hecho, con respecto a esta persona, aún no entiendo por qué se distanció, y aunque comprendo el origen de la diferencia, no entiendo cómo cala tan hondo su corazón una desaveniencia tan simple y banal. Al parecer a mi hermana la cazan los fantasmas de sus hombres, los de sus amigas, y los que pertenecen a su historia como los que pasan por su lado sin marcar huella. En este caso un altercado por un hombre arrasó con la amistad de dos mujeres (amistad de más de veinte años).
 
Eso no cabe en mi forma de pensar, y en mi código valórico.
 
No entiendo por qué yo soy capaz de pedir disculpas, o de perdonar y para ella eso tiene poco o nada de valor si no viene de si misma. Sí, reconozco que he perdido amistades, me he alejado de otras, y bueno, son procesos de vida. Lo que no entiendo es que algo sin importancia mate la amistad...
Le comenté que quiero organizar una reunión en la casa con esta persona incluida, e invitar amigos a cocinar y compartir. De modo de fomentar las reuniones interpersonales reales, por otra parte estoy cansada de tener solo amistades por internet, ¡es agotador! me faltan besos y abrazos fraternales, pero bien, ella impuso su necesidad de estar ausente si asistía esta mujer, y por último fue violenta y descalificadora verbalmente, terminando toda discusión lléndose de la cocina con un taxativo "Háblalo con mamá y que ella te diga". ¿En qué mundo vive que cree que a los treinta y tantos años va a pesar más lo que pueda decir mi mamá desde el sur, que lo que yo piense por mi misma respecto de un tema puntual?
El primo -que fue testigo de toda la conversación-discusión- estaba atacadísimo, según él somos unas graves y discutimos demasiado por cosas sin importancia, en mi opinión tiene razón, pero me asusta saberme arrastrada a esas desaveniencias que no provienen de mi.
Si yo sé que ella no quiere participar de ninguna invitación que incluya a esta persona, simplemente no la incluyo, pero este show mediático interno que me lanza es una exageración patética y enfermiza que me habla de un estado emocional descontrolado.  Con decir "conmigo no cuentes" basta y sobra. A buen entendedor pocas palabras.
Por último, no entiendo por qué sería yo una persona interesada si aprovecho una oferta amable de otra. En una relación de ganancia-ganancia.
Veo mi proyección de vida a largo plazo no condicionada a situaciones difíciles de prever: o sea, no condicionada a encontrar marido, tener hijos con un hombre que no conozco todavía, o ganarme el kino, y siendo realistas (es lo que hablabamos con esta amiga): a esta edad uno debe madurar y promover la amistad con personas con intereses parecidos y claro, también con diferencias, aunque sobrellevables. Yo también me neurotizo porque no consigo novio, y no tengo hijos y mi reloj biológico avanza... Pero mi vida no puede girar en torno a eso, y generar instancias donde pensar en otras cosas, o por último a través de las cuales conocer personas que me presenten novio (para zanjar el tema de una vez) es un enfoque tanto más positivo de ver el mismo tema. Tener amigos con los cuales juntarse a cocinar y comer, a correr o practicar deportes o hobbies, prestarse libros, compartir recetas, aprender una manualidad o ir de viaje, eso es lo que cuenta a la larga... Por que sino, ¿quién nos recogerá cuando estemos deprimidos, tristes o desválidos y huérfanos?
Y una rencilla estúpida, por un pelotudo liviano de sangre que quiere acaparar la atención de la mayor cantidad de mujeres posible, pues bueno, ¡eso no puede impedirme ver lo realmente importante!
Todavía estoy pensando en mi Mercedes y en mis sueños de amor fallido, claro, soy una soñadora, pero si quiero disfrutar, gozar, aprovechar la vida, entonces tengo que concentrarme y organizarme para vivir antes que soñar, y para concretar esos sueños, en lugar de dejarlos en tinterilla para siempre.
Cariños lectores, y todo mi ánimo a la optimista poniendo un pie fuera del clóset,
 
La que canta en el camino al trabajo, la parada de buses, la mente y el súper,
ABCD

viernes, 31 de agosto de 2012

Luna azul

Cuando posteé ayer, no tenía idea del fenómeno de la luna azul. Sin embargo su efecto se hizo notar. Tenía alguna noción de haber visto a la luna antes este mes, pero como no necesariamente uno anda pendiente de ello, no estaba en mis registros.
Me pareció maravillosa. 
Vi a mi amigo Geólogo. Estuvimos mirando tele y riéndonos de lo lindo con las bromas de Charlie Sheen en una de las primeras temporadas de Two and a Half Men, me sentí como cachorra en esa situación, sin obligación de hablar todo el rato... algo que no ocurre siempre. Salimos a comer al Alto Las Condes, y tuvimos una conversación versada en varios tópicos de común interés. El principal tema fue las diferencias de personalidades: extrovertidos v/s introvertidos: defectos y virtudes, ventajas y desventajas.
Otro tema fue la paternidad... los miedos que conlleva, el reloj biológico, etcétera. Un matrimonio joven, se sentó cerca de nuestra mesa, con un hijo menor de dos años, que insistía en mirarme y "conversarme". Geólogo me hizo notar que había causado furor. No puedo negar que mi ternura hacia el niño ralló en la envidia, claro no alcanzó a serla porque los bebés son puros.
Cuando él iba a pagar la cuenta fui al baño, y al salir no lo vi. Eso me hizo pensar que se había ido a fumar, salí a buscarlo, y cuando no lo encontré de nuevo me extrañó. De pronto, el mesero se acercó a mi y me dijo:
-Señora, su marido fue a buscar plata a un cajero, porque se nos cayó el sistema de la Redcompra...
Y yo, plop. Fui incapaz de corregir la alocución. No tenía idea que parecíamos marido y mujer. Creo que nunca nadie me había dicho que pareciera la mujer de alguien, mucho menos por lo del cuento de que no llevo anillos... Y por unos instantes me agradó la imagen. La pareja joven, con pocos años de casados que no tienen hijos todavía, comiendo juntos el día viernes, antes de volver a pasar el fin de semana descansando juntos también.
No es nuestra historia ni de cerca, por supuesto, pero suena rica. Saliendo del mall, condujo hasta mi casa, esperó que llamara a mi mamá, a mi familia para abrirme la puerta - dejé las llaves en el dormitorio por error esta mañana- y le conté un tema personal. Conversamos un ratito, nos despedimos con un piquito, y me dijo: -Te quiero- bruto como es él, continuó con un: -Cómo amiga, pero te quiero. 
Consecuente con mis creencias le dije: -Uno quiere a la gente como gente, si es como amigo, hermano u otra cosa, no es necesario decirlo. Yo también te quiero tonto.
Me bajé y me entré.

P.S.: Por un par de averiguaciones que he hecho, descubrí que hay tres Mercedes en mi familia. Mi abuela, cuyo segundo nombre es Mercedes, su abuela, y una tía abuela de mi papá. Creo que si en algún minuto de mi vida mi deseo lanzado al Universo se cumple y tengo una hija, se llamará Mercedes.

P.S.2: Posteriormente mi papá me contó que su tía tenía otro nombre, sin embargo mi abuela me confirmó que una tía de ella aparte de su abuela se llamaba Mercedes también ;)

Luna llena

Hola a todos,
Esta ha sido una semana de mucho post. Y mucho nervio también. Además he estado avanzando también en la novela, aunque no al ritmo del principio, porque soy de mucha corrección, pero me huele a hiperventilación a estas alturas.
Como algunos de ustedes sabrán, en mi zona geográfica faltan 21 días para el inicio oficial de la primavera. Esta fecha, reseñada por algunos como la fecha de los enamorados, y del renacimiento de la naturaleza entre otras barbaridades románticas -de las cuales no reniego, pero que de todos modos trato de ver objetivamente- no está exenta de dificultades.
Para quienes tememos a las crisis de insomnio, los bajones, o los highs... La primavera representa desde un reto, hasta una advertencia. No así el verano o el invierno que son otro cuento nada que ver.
Son los primeros días de la primavera y es un riesgo para mi -¿o debo decir nuestra?- salud emocional. Últimamente, noto que no soy la única. Tengo una compañera de trabajo que percibo que también la afecta, aunque imagino mil razones por las que ella jamás admitiría algo así.
Además hace un par de noches veo la luna, brillante, casi llena en el horizonte, y eso me afecta también. No de un modo supersticioso, sino real.
Profilaxis... recuerdo. Mantener la higiene del sueño. Tomar los medicamentos, en un ritmo constante ojalá a las mismas horas cada día. Asistir al control con el médico. Y no recuerdo el último exactamente.
La verdad si comiera menos alimentos azucarados, sé que mi vida sería tanto más fácil. Tanto mucho muy más fácil. Pero no renuncio a ellos. Simplemente confío en que mi páncreas se ayude de la medicación para funcionar mejor.
Está también el tema de mi cita. Por un momento, acostumbrada a cierto tipo de chascarros con los hombres, pensé que mi amigo iba a dimitir, ayer cuando hablamos quería que nos viéramos el sábado, y yo tenía planes de ir a Viña, entonces dije "tate, éste se corre". Para mi sorpresa, se arriesgó a dormirse más tarde el viernes, como habíamos planteado al principio, y no sé bien qué esperar de que él haga concesiones.
Mi amistad con él, que ha pasado por los estados más variopintos, ha tenido momentos de mucho egoísmo de su parte, y no lo estoy criticando. Uno se puede permitir ser egoísta, si respeta al otro lo suficiente. Él es individualista, y tiene ideas que no siempre entiendo. Así como yo soy entera enrollada, y ni yo me entiendo.
Supongo que mi propósito en mantener mi amistad, lo he dicho y lo defiendo es tener un espejo donde mirarme a veces. ¿Cómo ve un amigo que tiene una situación afectiva similar a la mía la vida?¿Como enfrenta los bajones?¿Cómo se levanta?¿Cuáles son sus metas?¿Cuáles son sus éxitos, miedos, ganancias y pérdidas?
Pero eso no exime de otros ribetes el tono de la amistad. Eso no exime de ganas de querer, de probar más allá, aun sabiendo que sólo son fantasías mías. Aceptar a un amigo como viene implica entender que no es lo que nos plazca que sea, sino que es lo que es no más. Es iguala cuando aceptamos que las cosas no funcionaron con una amistad y tenemos que dejarla ir. Duele a veces, otras veces alivia, pero no necesariamente es fácil.
La música es otro factor desconcertante, surge y surge a borbotones, por eso la aparición del otro blog http://mispalabrasmusicales.blogspot.com para ir guardándolas de algún modo, y compartiendo las que me parece pertinente compartir.
El curso también hiperventila un poco, los otros estudiantes son super opinantes, y expresan largos argumentos de todo tipo...
Bueno, así con mi vida por ahora, cariños a todos,
Ms. bus stop singer
 
A todo esto, propósito 10, voy en la página 45.

miércoles, 25 de julio de 2012

Decir algo difícil

A veces me pregunto ¿Por qué hay cosas que nos fluyen de la boca con una naturalidad básica y banal y hay otras que nos cuesta tanto poner en palabras ordenaditas y pronunciables? ¿Será que el interlocutor de nuestra conversación afecta la toma de decisión del tono, entonación, continuidad y fluidez de nuestro discurso o diálogo? ¿Será que algunas personas con las que nos relacionamos nos resultan fáciles de interpelar y otras nos intimidan?¿Será que algunos temas nos provocan más tensión que otros?
Por el motivo que sea, me he dado cuenta que comunicarse no es tan simple como emisor, medio, receptor. Forma, intención, contenido, fondo... contexto, lugar, tantos aspectos a considerar, incluso el momento justo para decir "me duele", "lo siento", "me importa" no es cualquier momento... Sino el indicado.
Debo abrir mi boca para plantear un tema, y no lo he hecho, y no sé cómo hacerlo. Es un tema importante y que me perturba. Incluso es probable que en un par de ocasiones invadiera mis sueños nocturnos con preguntas, sudores del tipo dónde está la salida y cuestiones similares.
Soy una persona hábil hablando de nimiedades entretenidas, y manteniendo ocupados los tiempos muertos, o de ocio... que suena más bonito, a la hora de almuerzo recuerdo anécdotas y las cuento gustosa, de buen humor, con una sonrisa a flor de boca. Pero cuando se trata de defender mis intereses, de decir "disculpe, ¿tiene un momentito?, ¿podemos hablar?" Ya no soy tan extrovertida y valiente. Atroz. Quisiera saberme hábil en este sentido. Negociación le dicen, creo. Quisiera sentirme segura de mi misma, cuando digo "no importa, si no lo menciono no existe", cuando en realidad sé que existe igual, lo diga en voz alta, o lo tema en voz baja.
Armarme de valor me toma tiempo, y puedo aprovechar ciertas circunstancias que favorecen mi meditado silencio. Sin embargo, en algun momento tendrá que imponerse la razón, enfriarse el estómago y posibilitarse la expresión del miedo en un acercamiento a la libertad. Porque hablar de lo que nos afecta, de lo que se encostra en nuestro corazón, y decir nuestros puntos de vista con verdad es liberarse de la opresión del miedo, de la inamovilidad de la incerteza, y continuar viviendo para contar anécdotas a la hora del recreo.