X., mi amiga bloggera me asignó una tarea. Resolvimos entre las dos que escribir acerca de los hombres en mi vida, de cómo vienen, ocupan un lugar, salen, con gloria o sin ella, podría resultar en un texto interesante. Y hasta ahora estoy conforme con el resultado, pero debo admitir que algo de pudor me da pensar que alguien alguna vez lea esa historia. Por alguna razón lo publicado en el blog no me molesta que sea visto. Sin embargo esto otro es un ejercicio en el que debo admitir y perdonar que algún día me comporté como un P. :)
jajajajajaj ¡y yo que siempre fui tan prudente! bueno en vista de estas historias que hago un esfuerzo por traer al netbook, no lo fui siempre. Y esa señores y señoras es la mayor prueba de que soy tan cristiana como Cristo anunció.
Sigo paseando al perro de mis amigos, y me gusta y me cansa, él me adora como ningún hombre me quiso nunca. Al parecer pasaremos las fiestas navideñas en casa, iremos a ver a mi hermana a Los Angeles al día siguiente, y por último, pasaremos el fin de año en Santiago. Tanto movimiento!!! Por la tarde quedé de ir a tomar un cafecito con A.
Mis noticias por ahora. Besos,
B.S.S.
Ánimo de anonimato Reflexiones acerca de lo que podría pasarle a cualquiera, aunque sucediera cerca mío. A veces, uno no quiere que algunos sepan lo que piensa. Nota editorial: la ausencia de firma no implica regalía de derechos de autor. Si quiere citar alguna de las entradas deje un comentario. Los nombres de los coprotagonistas de éstas historias han sido cambiados o reducidos por motivos de discresión.
miércoles, 18 de diciembre de 2013
Pensando en mi ejercicio corriente.
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1 comentario:
Siga con l atarea no más!! Y ahórrese los pudores para la edición :)
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