viernes, 18 de enero de 2019

Cuentos por doquier.

Ando en una época bastante literaria, a pesar de que no he escrito casi nada... Tengo la mente con ideas de títulos, con nombres de personajes, que no nombran, sino que describen. Recordando a Name of the Wind y su creativa exposición de caracteres y personajes,
Se me ocurre por ejemplo ideas que perduran y otras que se volatilizan solo segundos después de ser concebidas, en medio de la calle que calla, en medio de la vida que pasa.
Hoy va a la casa Miriam, una chica que nos ayuda con la limpieza del departamento, y pienso en el alivio que eso me provoca. Esa muchacha no debe imaginarse cuánto le agradezco su trabajo.
Estaba tentada de irme en volada con el KonMarie challenge, hasta que escuché que eran máximo 30 libros por casa, y me rallé. No permitiré ese tipo de negatividad en mi vida.
El fin de semana pasado preparé mermelada de damasco. Con unos damascos que me dio mi vecina de Puchuncavi, y quedó sencillamente deliciosa.
Mañana si Dios quiere estaré en Santiago con Jorge, visitando a Gabi en su cumpleaños número 5 y regalàndole la carterita de trapillo que tejí la primera vez que tejí con trapillo.
Preparandome para el fin del proyecto en el que trabajo, fui a preguntar al banco por beneficios de la tarjeta al terminar mi período laboral con la universidad, y me aseguran que no cambian las condiciones cuando dejo de trabajar para la USM. Espero que sea cierto.
Cariños a quien lea estas palabras, abrazo para mi!!
BSS



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